En Perú, las neoplasias de ovario no son de las más frecuentes y la mayoría suelen ser benignas, pero no son raras. Hay una gran variedad de neoplasias del ovario según su naturaleza, siendo las más frecuentes la neoplasia epitelial, en segundo lugar está la neoplasia germinal, luego la estromal y otras más raras.
Las neoplasias de ovario epiteliales suelen manifestarse en las mujeres por encima de los 50 años; en cambio, las neoplasias germinales en niñas, adolescentes y mujeres jóvenes; pero, hay excepciones.
Por su comportamiento las neoplasias epiteliales pueden ser benignas, malignas o estar en el límite (borderline). La neoplasia benigna se caracteriza por afectar solamente el epitelio donde se ha originado y sus células no haberse alterado significativamente. La neoplasia maligna del ovario (cáncer de ovario) tiene células muy alteradas en comparación con las células originales y, además, han invadido tejidos vecinos y/o a veces órganos a distancia (metástasis). La neoplasia borderline de ovario no ha invadido tejido vecino ni a distancia; pero, tiene células alteradas en sus características (tienen cara de malignas, pero sin el comportamiento invasor que caracteriza la malignidad).
La forma característica de presentación de la neoplasia de ovario es la masa anexial, palpada durante el examen ginecológico y/o corroborada o encontrada en la ecografía.
La masa anexial suele tener forma de una o varias bolsas llenas de líquido con tabiques y zonas sólidas en proporción variable. En general, cuanto más componente sólido y tabiques gruesos e irregulares en la masa, mayores posibilidades de malignidad.
El abordaje de casi todas las masas anexiales es la cirugía, ya que es la mejor manera que se tiene para definir su naturaleza y las opciones de tratamiento de manera fiable. Algunos casos, generalmente muy avanzados o en los que la paciente no toleraría la cirugía pueden ser abordados mediante biopsia con aguja punzada a través de la piel (sin abrirla) y dirigida a la zona sólida de tumor con guía ecográfica.
Muchas de las neoplasias que tienen características clínicas y radiológicas como de proceder del ovario no se originan realmente en el ovario, sino en trompas uterinas o peritoneo. Esto es particularmente cierto para las neoplasias epiteliales malignas de alto grado.